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El subrayado:
Cuando se lee un texto en profundidad, es útil hacer marcas personales para destacar conceptos importantes, ideas novedosas o que llaman la atención, palabras que no se conocen o no se comprenden. Una forma de hacerlo es subrayar o resaltar con color palabras, frases u oraciones.
Los textos se pueden subrayar con diferentes criterios o bien la idea central del autor o bien lo que al lector le resulte interesante. Sin embargo cuando se subraya un texto para resumirlo, citarlo o recordar sus ideas principales es importante centrar la atención en las afirmaciones que estructuran el texto: aquellas más importantes, las definiciones de un texto expositivo, las oraciones que resumen un párrafo, las conclusiones de una argumentación. Los ejemplos, los casos particulares y los detalles quedarán sin subrayar.
Una de las formas de comprobar que se han subrayado las frases más importantes, es leer en voz alta únicamente las partes subrayadas para observar si se comprende la idea global del texto.
